Friday, February 08, 2008

Habemus IFE, peeero…




¿Quiénes son Leonardo Valdés Zurita, Benito Nacif y Marco Antonio Baños? ¿Son los mejores? Lo que sí se sabe es que los nuevos consejeros llegaron con la guillotina sobre sus cabezas; además de que fueron escogidos, luego de un proceso humillante y nada democrático, por cuotas y aberrantes consensos, y que por ello y en cualquier momento les puede pasar lo mismo que al IFE de Ugalde, si no se pliegan a los deseos y las ocurrencias de los barones del poderoso G-3. Se trata de expertos en el tema pero no son los mejores, ni tampoco los más notables y menos los más populares.


En Astillero, para Julio Hernández López ayer fue instalada una cómoda administración miniaturizada de los próximos procesos comiciales: el presidente de ese instituto envenenado fue propuesto por el PRD, pero responde más a los intereses del panismo y el priísmo; el estilo Zavaleta de San Lázaro llevado ahora a las piernas electorales. Entre menos relevante y más condicionado fuera el nuevo consejero presidente del IFE más poder tendrían los verdaderos conductores del proceso de renovación, los legisladores priístas Beltrones y Gamboa. Ayer fue Elba Esther Gordillo la que impuso a Ugalde, ahora es el beltronismo el que impone el estigma del futurismo al nuevo consejero presidente –débil, desconocido–. Fue el final de una larga historia mal llevada. Embriaguez de poder legislativo que llevó a montar la farsa de la apertura de las plazas del IFE a ciudadanos que se sintieran con merecimientos y que concurrieron por cientos, llenando con creces varios de ellos los requerimientos que supuestamente se buscaban para, con los mejores mexicanos, remontar el descrédito y la vergüenza de la administración Ugalde. La felicidad reina en el imperio de las alturas: quedaron como nuevos consejeros no quienes tuvieron mejores calificaciones en los exámenes de conocimientos (Valdés, Nacif y Baños se mantuvieron en el 3, mientras otros consiguieron 4) sino quienes mejor se acomodaron a los naturales proyectos de los partidos que los nombraron y a cuyos intereses quedan explícitamente sujetos.


Granados Chapa, en su Plaza Pública de hoy, da cuenta de las trayectoras de cada uno de los consejeros:

Leonardo Valdés Zurita: Licenciado en economía, tuvo hace dos décadas militancia política en el Partido Mexicano de los Trabajadores, a cuyo líder, Heberto Castillo, era cercano y con quien emparentó {fue esposo de Laura Itzel Castillo, hija del luchador social y fundador de ese partido}. Se doctoró en ciencias sociales en El Colegio de México y se especializó en elecciones. Fundó y dirigió en la unidad Iztapalapa de la Universidad Autónoma Metropolitana el Centro de Estadística y Documentación Electoral, y presidió la Sociedad Mexicana de Estudios Electorales. En 1998 elegido consejero en el naciente Instituto Electoral del Distrito Federal. Su información y capacidad analítica han sido expresadas en muchos trabajos, señaladamente en el cuaderno número siete de la serie de divulgación de la cultura democrática publicado por la institución que ahora presidirá, que se titula Sistemas Electorales y de Partidos.
Marco Antonio Baños, nacido en Pachuca, licenciado en derecho, fue también director ejecutivo del Servicio Profesional Electoral en el IFE al que ingresó a las órdenes de Felipe Solís Acero, que es hoy el colaborador más cercano del senador Manlio Fabio Beltrones.
Benito Nacif, director de la división de estudios políticos del Centro de Investigación y Docencia Económicas (CIDE), al que ingresó en 1995, ha tenido experiencia como analista político en el ámbito público y privado: la Presidencia de la República en 1989 y 1990, y la consultoría Oxford Analytica de 1993 a 1999.

Thursday, February 07, 2008

La derrota de Chris



Muy pero muy sabrosa a estado la discusión pública provocada por la aparición del más reciente libro –‘diccionario’- de Christopher Domínguez M. Yo la verdad agradezco que nuestros escritores se agarren de vez en cuando, sobre todo porque me resulta divertidísimo, así como la manera en que cada bando se dice sus verdades.


Yo me entré de la discusión en el blog de Chucho Silva-Herzog para quien "ahora resulta que el crítico debe ser un IFE de la literatura. Reclaman a Christopher Domínguez el tratar a los escritores según el capricho de su gusto, de esconder la galería de sus afectos en la pompa de un diccionario crítico, de olvidos y maltratos imperdonables. Víctor Manuel Mendiola puede tener razón en cuestionar el título de la antología de Domínguez pero no alcanzo a entender los motivos para exigirle al ejercicio crítico la exactitud del censo. Guillermo Samperio ha pedido a la directora del Fondo que retire de circulación esta obra nociva. Yo sólo creo que hay que leerla sabiendo que no es un canon imperativo, sino lo que el propio autor anuncia: una antología personal. Entiendo que, al compilarla, el crítico es tan libre de escoger y ponderar a sus autores, como el novelista a sus personajes".


Para Víctor Manuel Mendiola el libro no es ni diccionario ni critico de la literatura mexicana:
Si leyéramos el último libro Christopher Domínguez como una reedición de muchos de los textos que ha publicado acerca de la literatura mexicana, podríamos pensar que con la nueva reunión el autor nos ofrece un panorama más armonioso de cierta parcela de sus lecturas. El reagrupamiento tendría cierto sentido y le concederíamos validez pero sin darle demasiada importancia. No es así. El reagrupamiento de las notas posee un valor que no se puede soslayar, tanto por el título como por la naturaleza del editor que lo publica. Es una publicación complaciente y plena de pretensiones que no responde a lo que debiéramos esperar de un libro con ese título comprometedor. En primer lugar, no es un diccionario. Es más bien una selección personal en la cual no es posible entender racionalmente por qué están unos autores y faltan otros. El uso de la palabra diccionario en una casa editorial con la autoridad del FCE y en el formato de diseño de la colección de los grandes diccionarios, debiera obligar a quien echase mano de ese vocablo, diccionario, y de ese epíteto, crítico, a cubrir los requisitos mínimos y aceptables del rigor. Si un estudioso hace un diccionario de botánica, no solo escoge las plantas representativas de su invernadero, sino las que están en los demás jardines. Si Domínguez dijera "Mi diccionario" o mejor aún "Mi selección", o "Diccionario de autor" , y si el FCE hubiera publicado esta obra bajo el formato de uno de tantos volúmenes de crítica, podríamos aceptarla o ponerle reparos, pero no tendría implicaciones editoriales graves. Pero al ser publicado con ese nombre ostentoso y con el anuncio del rasero "crítico" se da una valoración errónea de la literatura mexicana; se mal orienta y, peor aún, se le toma el pelo al lector. El título ostentoso no se corresponde con la selección limitada ni con muchos de los textos arbitrarios y vagos, insuficientemente procesados para un compendio de tal envergadura. Es incomprensible por qué el FCE aceptó publicar este refrito de notas.
En segundo lugar está la aritmética. Cuando el lector se percata de que Rubén Bonifaz Ñuño y Jaime Sabines tienen, el primero, una página y, el segundo, apenas un poco más de media, mientras que Enrique Krauze cuenta con diez y la mayor parte de los compañeros, amigos y directores o guías de Domínguez se llevan generosas revisiones, uno advierte que algo está torcido. A esta compilación le falta lo que tiene la crítica real: decisión para separarse de los compromisos personales y de los afectos, falta de independencia para caminar con opiniones propias. Por otro lado, cómo es posible que en un diccionario "crítico" de la literatura mexicana no estén José María Pérez Gay; Elena Poniatowska; Ángeles Mastretta; Ignacio Padilla; Sabina Berman ; Evodio Escalante (acaso el mejor ensayista de su generación); Federico Campbell; o, ya que Domínguez incluyó historiadores, cómo es posible que haya pasado por alto a Miguel León Portilla. La obra de todos estos autores nos puede gustar o no pero en un diccionario crítico deben estar ellos y otros más. Nuestra decepción crece aún más cuando advertimos que mientras Jaime Sabines, es en el tratamiento de Domínguez, un poeta priísta de clases medias, Enrique Krauze, con sus textos históricos de difusión, es un gran literato y casi un héroe de la protesta de la nacionalización de la banca. Al poeta se le juzga con martillo por sus posturas políticas y al articulista de ensayos políticos e históricos se le pone entre almohadillas por una supuesta voluntad de estilo.
Quizá otro de los problemas de este diccionario es la pretensión de Domínguez de abarcar lo que no comprende: la lírica. Él mismo ha dicho que no entiende la poesía. Si es así, ¿por qué su obstinación en dar opiniones que revelan falta de inteligencia en el entendimiento de los problemas fundamentales de la poesía? Esta insistencia muestra a Domínguez, una y otra vez, tan insensible como carente de gusto. Pero no son los disparos a tontas y locas de Domínguez lo que resulta verdaderamente preocupante, sino que el FCE en una publicación de esta clase, haya tirado por la borda la solidez editorial y haya minusvaluado a un gran número de escritores que son, en muchos casos sus propios autores. ¿Este es el diccionario critico que mostrará a la literatura mexicana en el extranjero? (Confabulario/El Universal / Sábado, 12 de enero de 2008)


Lo dicho en una demoledora carta por Guillermo Samperio:
Estimada Lic. Consuelo Sáizar (Directora del FCE):
El supuesto diccionario confirma que seguimos hundiéndonos cada vez más en el tercer mundo; quiero decir que un libro inconstante de estas características nunca aparecería en las altas instituciones editoriales de Inglaterra o Alemania, y si así sucediera es muy posible que el autor fuera ingresado a la cárcel, expulsado del país o, simplemente, tomado por loco, internado a algún nosocomio para enfermos de la mente. No es posible que le dedique diez páginas al ingeniero Krauze y dos páginas al inmortal poeta Luis Cernuda; es una ingratitud y ofensa tal exilio. Evaluando lo que está sucediendo y pasará con este diccionario apócrifo y pensando, además, en la trayectoria sinuosa y lacayuna que Domínguez Michael ha seguido, me hace pensar que este ser carece de humildad, compañerismo, sobriedad de lector, cree que toda literatura debe actuar conforme a sus ideas, le encantan las juntas cerradas, es intolerante, es el criticón o chismoso, el señor componetodo, el que pide que cambien los demás pero no él, el prefecto jactancioso, está lleno de peros, el recetador de pastillas, selectivo, fulano celoso o viejo jerarca y pretende usurpar el papel de un poder superior.
Como mexicano, como autor que ha recibido múltiples reconocimientos fuera de mi país y en él, le pido determinantemente que retire de la circulación el pseudodiccionario pues, este apóstata libro puede llegar a servir de consulta distorsionada en universidades de otras partes del mundo y para el mismo lector mexicano.
(El Financiero /17 de enero de 2008)


Y para finalizar, gracias al buen Rogelio Villarreal me entero de la critica (en la era de letras libres) hecha por Heriberto Yépez el 2 de febrero en el suplemento Laberinto:
No pido que el FCE retire el Diccionario crítico de la literatura mexicana 1955-2005 de Christopher Domínguez, como lo piden Mendiola y Samperio. Pero en algo tienen razón: el libro falló. No falló en lo estético: no sería grave. Todos escribiremos al menos un libro malo. Falló en lo esencial. Falló en lo ético. La obra será usada en cátedras y bibliotecas foráneas y paisanas. La visión que les ofrece no es responsable. El orden de las reseñas sueltas no altera el amiguismo reiterado.
Esta reunión de textos hecha diccionario no autocrítico resume su carrera. ¿Por qué las opiniones de Domínguez son centrales en nuestro campo literario? Heredó del grupo paceano-krauzeano el pulgar juicio imperial. Y los demás, entrampados por la herencia circense se autoinstalan el Status Software que les ordena temer y respetar la Gran Opinión. Siendo inteligentísimo, ¿por qué no recapacita y manda a la chingada todo el aparato que utiliza y lo está utilizando y se hace pleno escritor autónomo?
La inercia no corrige camino. Ante el rechazo, endurecen los favoritismos. No reconocer errores petrifica. Su ortodoxia ya tiene epígonos, que basan su timografía en la malaleche y la oportunitis. De verdad que da tristeza leer lo que hace con la crítica una parte de Letras Libres. Paz hacía crítica poética, inteligente y visceral. Domínguez es sólo inteligente y visceral. Sus párvulos son ya sólo vísceras sin pensar. En retrospectiva, se tiene la impresión de que Domínguez se ha convertido en su propio empobrecido discípulo.
Un texto hace ensayo, y al siguiente ¡relaciones públicas! Domínguez es desigual en lo que nunca hay que serlo: en la ética. Escribe bien: vía estilo disimula el compadrismo mexicano del que abusa. Nótese este fenómeno: ya no se le cree ni cuando dice la verdad. Cuando un narrador o poeta escribe sobre amigos, se entiende. Cuando lo hace un crítico literario profesional, se desacredita.
Domínguez, para tener lugar en la República, se hizo crítico-reseñista. Y para volverse crítico-protagonista hizo de su pluma culta pluma al servicio. En el futuro, Domínguez será usado como ejemplo de corrupción intelectual. Su gran talento no merecería ese sino.
Puede que LL encabece durante más tiempo la hegemonía literaria nacional. Pero no la lucidez o equidad. Ni mucho menos la rara belleza de la ética. LL falló. No lo aceptarán jamás. En honor a la tradición que dicen continuar deben hacer una severa revisión. Algunos lo saben en su interior. A veces la corrupción mexicana se disfraza de revista internacional. De no hacerlo forjarán destino como miembros distinguidos del cacicazgo yuppie, sobrino bonito del PRI mental.

Wednesday, February 06, 2008

Presentación de libro de Antonio Ortuño


Hoy en el Centro Cultural Universitario a las 19:00

Tuesday, February 05, 2008

Aniversarios: doña Constitución



La nuestra es una de las de las constituciones más avanzadas que hay en el mundo, cuyo espíritu no está agotado ni en lo político ni en lo social. Hemos tenido varias constituciones, pero ninguna por capricho. La primera data del 4 de julio de 1824, votada dos días después de que Guadalupe Victoria fuera declarado primer presidente de México. La guerra de independencia había terminado y era preciso abrogar los preceptos virreinales y crear las normas del México nuevo. La Constitución de 1857 recogió los postulados de la Reforma y para muchos su texto compendia el constitucionalismo mexicano, pues significaba la ruptura con el pasado en sus más relevantes aspectos, como lo son el poder económico y político de la iglesia y la derogación de los fueros y privilegios militar y eclesiástico.
La Constitución de 1917 representa el colofón jurídico de la revolución y en ella quedaron inscritos los principios de soberanía, derechos humanos, división de poderes, el sistema federal y de representación, la supremacía del Estado sobre las iglesias y la existencia del juicio de amparo. La primera constitución estableció las normas del México independiente, sometido a España durante tres siglos; la segunda dejó atrás los sedimentos políticos y religiosos de la conquista y la tercera incluyó en su texto los reclamos de justicia social que sustentaron el movimiento armado de 1910 y que siguen pendientes.

Caricatura sobre la festejada del dia de hoy


Nuestra Constitución

Replicante 14



Consumismo vs comunismo...
En unos días más Replicante 14.


APUNTES Y CRÓNICAS
Ask a Chola, una pandillera del web 2.0 -Entrevista de Leo Agusto
El acorde que no entona con Fidel -Daniela Rea
La herencia del maya: entre el bosque y la sangre -Raúl Olvera Mijares
El espectáculo en la tierra de Calderón. Campañas y elecciones -Francisco Valenzuela
Un mundo portátil. 'Ètats de lieux' de Charles Matton -Mariana Martínez Salgado
La fascinación del estrangulamiento (Encuentro teatralizado) -José Mariano Leyva
Encantadores de serpientes. José Donoso -Entrevista de Raúl Silva
Músicos de Jalisco en Nueva York -Alfredo Sánchez Gutiérrez
Tijuana hip hop -Claudia Franco
Las Malvinas son uruguayas -Adrián Herrera
MICROTXTS: el pequeño desafío literario -Rafa Saavedra
Nadie se muere a las tres de la tarde -Juan Antonio Molina
Transatlántico -Ari Volovich


NOTICIAS Y RESEÑAS
Lectores que escriben
LIBROS Y AUTORES
Historia del periodismo cultural en México, de Humberto Musacchio - La cátedra Fray Servando Teresa de Mier - Sergio Pitol revisited - Posthumano, de Mauricio Bares - Bajo un sol herido, de Leonardo Da Jandra - La noche, de Agustín Ramos - Murania, de Alejandro Pérez Cervantes - Bóreas y el Sol, de Francisco Serrano - La contracultura a través de los tiempos, de Ken Goffman - Las cartas de la ayahuasca, de William Burroughs y Allen Ginsberg - El círculo de los escritores asesinos, de Diego Trelles Paz - Salidas de emergencia, de Alexis Romay, y Don’t make a scene, de Valerie Block - Venus en India, de Charles Devereaux - Los policías: una averiguación antropológica, de María Eugenia Suárez de Garay - La felicidad paradójica. Ensayo sobre la sociedad de hiperconsumo, de Gilles Lipovetsky - El encanto de un mundo desencantado, de George Ritzer -
CINE Fraude, México 2006, de Luis Mandoki - Tigres salvajes que he conocido, de Cam Archer -
CRÍTICA CULTURAL No Klein: Marcos y la ideóloga - '¿Qué es la cultura?', León Ferrari
LITERATURA GRÁFICA Klassic Komix Club Number, de Johnny Ryan - Rise of the ogre, de Gorillaz - The Complete Calvin & Hobbes, de Bill Waterson -
TIEMPO FUERA De credibilidades en pugna - Santa Carmen, la Virgencita del Periodismo -
MÚSICA Amy Winehouse y Joss Stone - Un baterista solista: Jan Axel Blomberg (Hellhammer) - In Rainbows, de Radiohead - All Hour Cymbals, de Yesayer


PENSAMIENTO Y REFLEXIÓN
Teorética del consumo -Héctor Villarreal
Primer Manifiesto del Partido Consumista antiMexicano (PCM)
Sobre consumir sin culpa -Guillermo Núñez Jáuregui
El consumo lector -Vianett Medina
Las 13 razones de nuestro fervor por las listas -Marni Jackson
La Cajita Feliz y la publicidad infantil -Elisa Corona Aguilar
Matthieu Laurette, el artista que surgió de la sección de congelados -Véronique Ricardoni
El Show de Marcos (decadencia de un Rebel Star) -Paco Inclán
Descenso a los infiernos. Tránsitos desde la elite ilustrada hasta la masificación acrítica -Francisco Arvizu Hugues
El gran espectáculo borgiano -José Javier Coz
El 'cool' radical, la supremacía Brown y la cultura post-narrativa -Paul Doru Mugur
Contra el espectáculo -Paco Inclán
Karlheinz Stockhausen, el compositor extraterrestre -Jorge E. González Ayala
Envía 'lágrimas' al *999. Otro capítulo de telenovela -Andrés Bacigalupo
Infomerciales. Usted ahorrará tiempo -Raquel Castro
Disney: como el mundo, pero major -Iván de la Torre
Series televisivas: entre el folletín y el arte -Iván de la Torre
Narcos contra faranduleros -Jesús Manuel Lomelí
El gran espectáculo nazi -Bibiana Camacho
¿La gente se ríe de ti por leer cómics? -Jorge Flores-Oliver
Los superhéroes que salvaron al arte -Luis Felipe Álvarez
Las imágenes en el nuevo orden tecnocultural -Héctor Villarreal
Martin Crimp: aproximaciones a la imagen -Noé Morales Muñoz
Norman Mailer: un fuera de la ley psíquico -Jorge Flores-Oliver
Scientia: Specere per accidens -Tania Anaid Gutiérrez-García
Uruguay vs. Argentina: culpables de un conflicto escandaloso -Rafael Juárez Sarasqueta
¿Y ahora qué?... Estrategias colectivas en tiempos de crisis (Argentina post 2001) -Ana Lucía Cervio
El mercado de la poesía -Iván Trejo
La nueva carne, la tecnología y la muerte del sujeto -Deyanira Torres
El triste espectáculo del nacionalismo patriotero -José Ramón López Rubí Calderón

Noticias para este 05-02-2008


Devueltos, finos obsequios enviados a Felipe Calderón
Ciudad de México.- Integrantes del gabinete como Carlos Hermosillo y Sergio Vela; los gobernadores Enrique Peña Nieto y Mario Marín; el presidente del Partido Verde Ecologista, Jorge Emilio González; la lideresa sindical Elba Esther Gordillo Morales; el dirigente de los industriales, Ismael Plascencia, y la consejera de la Judicatura María Teresa Herrera Tello integran el grupo de 71 personajes que enviaron finos obsequios al presidente Felipe Calderón en su primer año de gobierno, cuyo valor excedió el límite establecido por la ley.
Plumas Mont Blanc, mancuernillas de oro con diamante, cinturón con hebilla de plata, un sillón puf, botellas de vino Vega Sicilia, arcones de doble piso… forman parte de un selecto catálogo de 75 obsequios devueltos por Los Pinos, debido a que excedían el tope legal, actualmente de 505 pesos.
De diciembre de 2006 a noviembre de 2007 se enviaron 936 "regalos" a Calderón Hinojosa, indica una lista entregada por la Presidencia de la República a este diario, producto de una petición formulada por conducto del Instituto Federal de Acceso a la Información (IFAI), que especifica remitente y tipo de obsequio, aunque no da detalles sobre su valor comercial ni sus características y, en el caso de algunas obras plásticas, tampoco aclara títulos ni autores.
De haber aceptado estos elegantes presentes, Calderón Hinojosa habría violado la Ley Federal de Responsabilidades de los Servidores Públicos, que prohíbe aceptar o recibir dinero o cualquier otra donación, excepto cuando el valor acumulado durante un año no sea superior a 10 veces el salario mínimo diario vigente en el Distrito Federal en el momento de su recepción.
De acuerdo con estos datos, el gobernador del estado de México, el priísta Enrique Peña Nieto, encabeza la lista de personajes que entregaron más obsequios, con cinco, entre ellos una corbata de seda de la prestigiada marca española Loewe –cuyo precio mínimo es de mil pesos– y un cuadro de la Virgen de Guadalupe, que finalmente regresaron a su poder por su alto valor.
Como el mexiquense, el gobernador del estado de Tamaulipas, Eugenio Hernández Flores, también militante del partido tricolor, hizo llegar en dos ocasiones obsequios de costo desmedido: primero una botella de vino tinto y posteriormente una fina chamarra de gamuza color vino.
En la lista de objetos devueltos en dichas fiestas decembrinas aparecen además los gobernadores priístas Mario Marín, de Puebla (tibor de talavera); Jesús Silverio Cavazos, de Colima (cuadro); los perredistas Zeferino Torreblanca, de Guerrero (caja de cartón con arcón navideño), y Narciso Agúndez, de Baja California Sur (hielera con perecederos y caja con latas diversas).
En el grupo de empresarios que buscaron halagar al Presidente con objetos excedidos de valor se encuentran el dueño de los grupos Posadas e Imagen, Olegario Vázquez Raña, y su hijo Olegario Vázquez Aldir, que hicieron llegar un "arcón de doble piso con botellas de whisky, vino, champaña, latas varias y galletas".

Presentes del grupo gordillista
En la celebración del cumpleaños 45 del Presidente, la lideresa magisterial Elba Esther Gordillo y dos cercanos colaboradores suyos también sobrepasaron el precio aceptable para los obsequios. La maestra quiso consentir a Calderón con un sillón puf; el ex priísta y senador por el PAN, Rafael Moreno Valle, con unas mancuernillas Tiffany, "con las iniciales FCH", y el líder del Partido Nueva Alianza (Panal), Tomás Ruiz, con una botella de tequila Herradura.
La Jornada


Inician elecciones del "supermartes" en EE.UU.
Washington.- Millones de estadounidenses comenzaron a acudir a las urnas hoy en la jornada del "supermartes", en la que los aspirantes presidenciales demócratas y republicanos intentan afianzar la candidatura de su partido.
Un total de 24 estados, entre ellos California, Arizona y Nueva York, realizan hoy primarias y "caucus" o reuniones asamblearias, en una de las elecciones más reñidas de la historia reciente del país.
Las urnas ya abrieron en varios estados de la costa este del país, entre ellos Massachusetts y Nueva Jersey, donde el gobernador del estado, Jon Corzine, no pudo votar a la hora prevista debido a problemas técnicos con las máquinas de votación en una estación de bomberos.
Corzine, que ha dado su respaldo a la senadora demócrata Hillary Clinton, tuvo que esperar alrededor de 45 minutos mientras se resolvía el problema.
Clinton y el ex presidente Bill Clinton emitieron su voto a tempranas horas en Chappaqua, Nueva York, aunque no ofrecieron declaraciones.
Se calcula que unos 6 millones de estadounidenses que viven en el exterior están habilitados para votar en las primarias de hoy. Por ello, desde Asia y Europa hasta América Latina, miles comenzaron a emitir su voto en hoteles, cafeterías y, por primera vez, a través de internet.
En esta jornada electoral están en juego alrededor de mil 23 delegados republicanos y unos mil 681 delegados demócratas, quienes a su vez elegirán al candidato presidencial de su partido en las convenciones de agosto y septiembre próximos.
Para lograr la candidatura presidencial, se requiere, por el lado republicano, un total de mil 191 delegados, y 2 mil 25 del lado demócrata.
Ávidos de votos y respaldos políticos, tanto los senadores Hillary Clinton y Barack Obama, del lado demócrata, como el senador John McCain y los ex gobernadores Mitt Romney y Mike Huckabee, del lado republicano, viajaron el lunes a distintas ciudades del país en una lucha contrarreloj en busca de votos.
Según datos oficiales, sólo Clinton y Obama han gastado más de un millón de dólares al día en propaganda política y anuncios publicitarios.
Obama continuaba hoy su batalla campal contra Clinton, concediendo entrevistas a los principales programas de televisión.
La noche del lunes, Clinton compró una hora de programación en el canal de Hallmark, para dirigirse a los votantes desde Nueva York.
Tanto Clinton, única mujer en la contienda presidencial, como Obama, único afroamericano, buscan hacer historia en los comicios generales del próximo 4 de noviembre.
Además, si gana la presidencia uno de los senadores en la contienda, sería tan sólo la tercera vez en la historia reciente de Estados Unidos.
El entonces senador demócrata de Massachusetts John F. Kennedy ganó la presidencia en 1960 y, 40 años antes, lo logró el senador republicano Warren G. Harding.
Según observadores, la mayoría de los candidatos han llegado a la Casa Blanca después de ponerse a prueba como gobernadores estatales.
El Universal