Friday, August 22, 2014

Plurinominales y partidocracia

Interesantisima la intervención de Ignacio Marván

https://www.youtube.com/watch?v=zObhp-i2k3Y&feature=youtu.be


Aquí la intervención de José Woldenberg en Noticias MVS primera emisión

http://aristeguinoticias.com/2108/mexico/reducir-plurinominales-podria-premiar-al-pri-woldenberg/


Y acáel articulo de Agustin Basave sobre su concepto de partidoclasia

http://www.eluniversalmas.com.mx/editoriales/2014/08/71957.php


Thursday, August 14, 2014

México, un país que pareciera premiar la traición

[Recordemos] siempre, sus abusos y cinismos. No olvidando a quienes abusaron del poder. Prohibido olvidar. Eso sí está en nuestras manos. Increpándolos públicamente. Dejándoles por siempre la etiqueta de “corruptos”. Cancelarles su futuro político. Emilio Gamboa Patrón y sus relaciones amafiadas. Luis Alberto Villarreal y sus “moches” y bacanales. Los senadores apoyadores del duopolio televisivo. Recordemos a Javier Lozano cuando pida el voto para ser gobernador de Puebla...  En México, un diputado recibe al mes más de 148 mil pesos entre dieta neta mensual (74 mil pesos) y “apoyos económicos” que incluyen 45 mil 786 pesos por “asistencia legislativa” (¡por ir a trabajar!), y solo 28 mil pesos para atención ciudadana... Los gastos de los diputados por viajes al extranjero, ascendieron, en lo que va del año, a 55.6 millones de pesos... ¿Hasta cuándo terminarán los abusos de los legisladores? Hasta que los ciudadanos se asuman como una sociedad más crítica y menos tolerante a sus pillerías. A los abusos del poder legislativo, la intolerancia de la población a su justa medida. De no hacerlo, sigamos viendo cómo saquean presupuestos y se enriquecen al amparo del erario público. De no hacerlo, no nos quejemos entonces.
Entren a http://representantes.pati.to/ ubiquen a sus diputados, senadores y representantes locales, manden un e-mail o llamen a sus oficinas preguntándoles qué van a hacer con los bonos de este año, si están comprometid@s con la transparencia y en específico qué hacen por ella y sigan haciéndolo así al menos una vez al mes con los temas que les interesen. 10 minutos de nuestro tiempo al mes, al menos para que los diputados usen algo de esos 28 mil pesos en atención ciudadana.
Por: Martín Moreno 

 

Wednesday, April 30, 2014

La Constitución y las leyes



Por: Francisco Valdés Ugalde

La Constitución es el pacto; el recuento expreso de los derechos que tenemos los mexicanos y la estipulación de la forma en que nos damos gobierno. Son las reglas del juego fundamentales; las que deben dar certidumbre sobre lo que a cada quien corresponde dar y recibir; las que encierran los valores esenciales de la convivencia económica, política, social y cultural. Las segundas son las formas concretas de instrumentar esos valores, reglas y derechos, de ponerlos en práctica, de hacer que se respeten y que sean "justiciables". El valor fundamental de una democracia constitucional es la justicia y sus dos ramas principales la equidad y la solidaridad. Toda acción contraria a ese valor, sea ocasional o sistemática, pone en riesgo al Estado y somete a la sociedad al arbitrio de poderes ilegítimos.
En nuestro sistema constitucional, esa diferencia de dimensiones hace que la Constitución y la ley operen diferente. Por ello hay órganos facultados para decidir o garantizar la constitucionalidad y otros para la legislación ordinaria. Modificar la Constitución requiere mayoría calificada en el Congreso general y el concurso de la mayor parte de las legislaturas de los estados. La legislación federal requiere del acuerdo de la mayoría de ambas cámaras del Congreso o de alguna si se trata de materias exclusivas. Las legislaturas estatales están subordinadas a la Constitución y las leyes federales y deben legislar de conformidad con ellas.
La rigidez de la Constitución impide su transformación a capricho en un medio democrático y competitivo. Lamentablemente no era así cuando estas condiciones no se reunían y el presidente era el gran legislador a través de la subordinación de los poderes Legislativo y Judicial.

Monday, April 21, 2014

Imagenes

Aquelarre de Goya


Jardin de las delicias



Pantagruel


Thursday, February 13, 2014

Desobediencia civil, Constitución... y Salinas


Se busca Constitución
Reformas realizadas a la Constitución durante sus respectivas administraciones: Álvaro Obregón, 8; Plutarco Elías Calles, 18; Emilio Portes Gil, 2; Pascual Ortiz Rubio, 4; Abelardo L. Rodríguez, 22; Lázaro Cárdenas, 15; Manuel Ávila Camacho, 18; Miguel Alemán, 20; Adolfo Ruiz Cortines, 2; Adolfo López Mateos 11; Gustavo Díaz Ordaz, 19; Luis Echeverría, 40; José López Portillo, 34; Miguel de la Madrid, 66; Carlos Salinas de Gortari, 55; Ernesto Zedillo, 77; Vicente Fox, 31; Felipe Calderón, 110; y Enrique Peña Nieto, en un año, lleva 21. Sumados son 573.

Pablo González Casanova, en su memorable libro La democracia en México, editado en 1965, nos brinda el número de iniciativas presidenciales que hasta el año en que publicó la obra, habían sido rechazadas por la Cámara de Diputados. Cero, ninguna. Su idea era probar el poderío del mandatario en turno, su omnipotencia. Hemos cambiado. Ahora, bajo la dictadura de los partidos políticos, todos proponen y vuelven a proponer, aportan las reformas propias a través de legisladores de poca monta.


Bienvenidos a la colonia Carlos Salinas de Gortari
Cuando Salinas concluyó el sexenio, en México había 47 millones de pobres, un millón más que cuando lo arrancó. El 52% de la población de 1994 vivía en esa circunstancia.
El sexenio calderonista concluyó con 59.6 millones de personas en esta circunstancia; es decir, el 51.3% de la población, un aumento de 21% en el número de mexicanos que viven en esa circunstancia, en comparación con las cifras de 2006, la Comisión Económica para América Latina informó que en el último año del calderonismo y el primero de Enrique Peña Nieto, un millón de personas se sumó al universo de la pobreza.
La generación del cambio entrega al país una crisis mayúscula, política, económica y moral.


Desobediencia civil
Isidro H. Cisneros

Promotor de la no violencia, Gandhi utilizó frente a la opresión colonial británica, métodos de lucha social novedosos como la huelga de hambre, la negativa al pago de impuestos o la desobediencia de las leyes. Pregonó como forma de lucha la totalidad fidelidad a los dictados de la conciencia, desarrollando una enorme influencia moral sobre el proceso político que llevaría a la independencia de la India de la dominación inglesa. Gandhi enseña que la desobediencia es civil, porque quien la cumple afirma no cometer un acto de transgresión de su propio deber en cuanto ciudadano, sino todo lo contrario, considera que se comporta como buen ciudadano más bien desobedeciendo que obedeciendo las leyes emanadas de un orden político percibido como injusto y opresivo.
Diversos pensadores como Henry David Thoreau en su obra Desobediencia Civil o John Locke en sus Dos Tratados Sobre el Gobierno Civil plantean el problema de la felicidad pública y de las reglas morales que hacen posible la libertad de los ciudadanos en un Estado democrático. Sus argumentos sobre el derecho a la desobediencia civil en contra de la opresión son verdaderamente actuales. Dice Thoreau: “El gobierno en sí, que es únicamente el modo escogido por el pueblo para ejecutar su voluntad, está igualmente sujeto al abuso y la corrupción antes de que el pueblo pueda actuar a través suyo. La única obligación que tengo el derecho de asumir es la de hacer a cada momento lo que considero justo”, mientras que Locke agrega: “Allí donde acaba la ley empieza la tiranía, quien ejerciendo autoridad se excede en el poder que le fue otorgado por la ley, y se sirve de la fuerza para cargar sobre sus súbditos obligaciones que la ley no establece, deja de ser un magistrado y se le puede ofrecer resistencia”.
Las justificaciones de la desobediencia civil se encuentran en una ley moral superior a las leyes de cualquier gobierno. La eficacia de la resistencia civil radica en que es una forma de disenso que tiene motivaciones de conciencia. Busca renovar el orden jurídico y ciertas políticas de gobierno. Se entiende que la resistencia civil se presenta como último recurso cuando han fracaso los caminos de la persuasión y el diálogo. Representa una reivindicación del poder ciudadano frente a los políticos tradicionales, así como el derecho a la expresión pública y pacífica del disenso social. Es una forma de protesta legítima en los sistemas democráticos. La resistencia civil cuestiona la eficacia del orden constituido sin meterlo en crisis. Es considerada civil, porque acentúa el componente ciudadano en oposición a la sociedad política, y por el carácter público, pacífico y demostrativo de los actos de resistencia. Las dos características que la distinguen son la acción de grupo y la no violencia.
Cuando se habla de desobediencia civil es necesario tener presente que los dos polos de la acción política son la obediencia y la resistencia, y que el deber fundamental de toda persona sujeta a un ordenamiento jurídico es obedecer las leyes. Este deber se llama obligación política. La general y constante obediencia a las leyes es al mismo tiempo la condición y la prueba de la legitimidad del sistema político. El poder legitimo es aquel poder cuyos mandatos son, independientemente de sus contenidos, obedecidos. La desobediencia civil se lleva a cabo con el objetivo de demostrar públicamente la injusticia de una ley y para inducir al legislador a cambiarla. Expresa las esferas de autonomía de la sociedad civil.
El deber de la obediencia y el derecho a la resistencia son dos temas clásicos de la teoría política. El estudio de las formas de adquisición, ejercicio y conquista del poder, nunca abandonó la reflexión sobre las modalidades de resistencia a la opresión. La práctica de la desobediencia ciudadana es quizá, la única forma de presión legítima que sirve para modificar las relaciones de poder vigentes en el interés de los gobernados. No hay duda de que el viejo tema de la resistencia civil adquiere actualidad en el contexto que estamos viviendo. La saludable reactivación de la sociedad civil mexicana implica, sin embargo, el riesgo latente de un despertar caracterizado por las convocatorias fundamentalistas a la antipolítica y al rechazo de las instituciones y de sus representantes.

Tuesday, January 28, 2014

La Democracia en América

Escribe José Antonio Aguilar Rivera en Nexos:

Vale la pena citar en extenso las conclusiones al segundo volumen de la Democracia en América. Ahí Tocqueville describió la sociedad democrática: “las almas no son vigorosas, pero las costumbres son suaves y las leyes humanas. Si bien no hay grandes devociones y hay pocas virtudes que sean muy altas, brillantes y puras, en cambio los hábitos son constantes, la violencia es rara y la crueldad es casi desconocida. Los hombres viven vidas más largas y su propiedad está más segura. La vida no es muy vistosa, pero es muy cómoda y pacífica. Hay pocos placeres que sean muy groseros o muy delicados. Hay poca cortesía en los modales pero muy poca brutalidad en los gustos. Uno raramente encuentra hombres muy ilustrados o poblaciones muy ignorantes. El genio se vuelve escaso y la ilustración más común. La mente humana se desarrolla a través de los pequeños esfuerzos combinados de todos los hombres y no por el impulso poderoso de unos cuantos de ellos. Hay menos perfección, pero más fecundidad en los trabajos… casi todos los extremos se vuelven suaves y romos, casi todos los picos se desgastan para transitar a la medianía, que es a la vez menos alta y menos baja, menos brillante y menos oscura que lo que se había visto en el mundo. Veo esa masa innumerable compuesta de seres similares, en donde nada se eleva o cae. El espectáculo de esta uniformidad universal (y de esta mediocridad) me entristece y me asusta, y estoy tentado a lamentar la sociedad que ya no existe. Cuando el mundo estaba lleno de hombres muy grandes y muy pequeños, muy ricos y muy pobres, muy ilustrados y muy ignorantes (muy afortunados y muy miserables), volteaba la vista de los segundos para fijarme en los primeros y éstos deleitaban mi mirada. Pero entiendo que este placer surgía de mi debilidad; puedo discriminar y escoger de entre tantos objetos aquellos que me placen porque no puedo ver todo lo que me rodea a la vez. No le ocurre así al Ser eterno y todopoderoso, cuyos ojos necesariamente abarcan, a la vez, a toda la humanidad y a cada hombre en particular. Es natural creer que lo que más satisface la vista del creador y preservador de la humanidad no es la prosperidad singular de unos cuantos sino el mayor bienestar de todos, así que lo que me parece decadencia a sus ojos es progreso; lo que me lastima, a él le place. La igualdad es, tal vez, menos alta, pero es más justa y su justicia conforma su grandeza y su hermosura”.