Friday, October 03, 2008

El movimiento en los diarios de Salvador Elizondo

Miércoles 28 de agosto de 1968. Un día muy extraño. Ayer fui a la manifestación de los estudiantes. Muy interesante. Pero más interesante es ver a los espectadores desde un punto de vista móvil. Todos tenían miradas graves; menos los comunistas. Casi todos estaban entre el público. Saludé a mucha gente conocida entre el público: a Archibaldo Burns, a la China Mendoza que me felicitó por desfilar (a gritos, por supuesto). Los litterati no estaban. Bernardo Giner de los Ríos interpeló en una esquina a las “muchedumbres” y Villoro iba del brazo de una muchacha sonriente y pseudo-optimista por supuesto. Si yo sustentara las mismas ideas que Villoro, nunca sonreiría, o si fuera sacerdote tampoco sonreiría.
Domingo 22 de septiembre de 1968. El movimiento estudiantil está cobrando momentum. Ambas partes están ya demasiado comprometidas como para echar marcha atrás. Yo creo que las Olimpiadas no se celebrarán y si se celebran será el gobierno el que salga perdiendo con ello. En este caso yo creo que el gobierno tiene la batalla perdida de cualquier manera. Anoche un militar mató a dos granaderos y yo creo que ya toda la clase media está de parte de los estudiantes. La clase media es la que hace las revoluciones siempre. Como en Rusia.
Lunes 23 de septiembre de 1968. Por la tarde, a una manifestación en San Ángel. Primer encuentro en mi vida con el fuego de las armas. Los pequeños líderes están desvirtuando la pureza del movimiento encauzándolo por direcciones de tipo de política interna. Si el movimiento se distrae con Barros Sierra habrá perdido toda su fuerza destructora. Si la manifestación de hoy en la tarde hubiera continuado por Insurgentes hacia el Zócalo en lugar de desviarse hacia la casa del rector, en el Zócalo hubiera habido una apoteosis si no es que una matanza terrible de estudiantes. En resumen, creo que el movimiento estudiantil original está perdiendo fuerza.
Martes 24 de septiembre de 1968. El Politécnico fue ocupado por el ejército esta madrugada después de una batalla que duró doce horas. Unos obreros trataron de tomar un ingenio azucarero y ese fue ocupado por el ejército. Hoy en la mañana vino a verme Montes de Oca para decirme que al encargado de la revista del Pen Club lo habían herido en la Universidad y que el ejército había confiscado sus papeles, entre los que estaba La puta de Nápoles. Ese relato tiene una especie de maleficio. Luego viene Juan Guerrero a decirme que el lunes empieza la filmación de Narda o el verano en Acapulco, así es que estaré allá durante la filmación. Iré a ver a Sofía. Mientras tanto tengo que revisar todo el guión de aquí al sábado. Hay que corregir prácticamente todo.

Aristóteles y Tlatelolco

En 1968, los jóvenes de Europa, los de Estados Unidos, los de América Latina tenían mucho que reclamarle a la sociedad. ¿Qué mundo les legaban sus padres? ¿Qué harían al graduarse? ¿Qué les ofrecía la sociedad de consumo? ¿Qué les brindaba su país?.

El ejército tomó la plaza y hombres vestidos de civil que llevaban un guante blanco o un pañuelo para identificarse desataron la balacera. La desbandada fue general y el fuego cerrado y el tableteo de las ametralladoras convirtieron el lugar en un infierno. Según el periódico inglés The Guardian, murieron más de trescientas personas y las que llegaron a los hospitales tenían heridas en la espalda, en los glúteos, en las piernas, porque les dispararon por detrás mientras huían. El único movimiento estudiantil en el mundo que terminó en una matanza fue el de México. Han pasado 40 años de la masacre del 2 octubre en Tlatelolco, pero los mexicanos no olvidamos el acontecimiento más trascendente de México en la segunda mitad del siglo XX. La frase "2 de octubre no se olvida" recuerda a una generación que luchó contra el autoritarismo y cada año convoca a una marcha que sigue exigiendo el esclarecimiento de los hechos, a pesar de haber llevado al ex presidente Echeverría al banquillo de los acusados.

Hace 24 siglos Aristóteles consignaba que cuando el hombre se aleja de la ley y la justicia se transforma en el peor de los animales. Pensadores de todos los tiempos han reiterado que las leyes son centrales en la preservación de la civilidad. Y la majestad de las leyes aparece cuando un magistrado resuelve y juzga inspirándose en lo justo y lo legal. En ese ámbito, la suprema corte tiene enormes responsabilidades. Una de ellas está en ser la última instancia a la que pueden recurrir quienes tienen garantías individuales violadas por las autoridades. Durante décadas la suprema corte de justicia estuvo sometida a los dictados del presidente. El ejecutivo reinaba sobre el presupuesto, el congreso y las leyes. Entretanto, los mexicanos veían con indiferencia y desdén el desconocido mundo de sombras y corrupción en que estuvo sumido el poder judicial. En esa historia negra destaca el vergonzoso comportamiento que mostraron los jueces ante el movimiento estudiantil del 68 y la noche de Tlatelolco. En lugar de defender la justicia, se aliaron con una de las partes. Si miles de jóvenes abdicaron de la vía pacifica, en parte fue porque la legalidad y la justicia se quedaron encerradas en bibliotecas jurídicas empolvadas por la falta de uso.

Monday, September 29, 2008

Madero es Lunes¡¡¡


¡Arriba, Adalberto!, ya es lunes y hay que seguir holgazaneando.

calderon, shakira, la onu

No puede con su país, pero el lic. Calderón quiere tener un asiento en el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas. Su patria arde minuto a minuto, pero él tiene suficiente tiempo para posar en Nueva York junto a Shakira y Alejandro Sánchez Pizarro (Sanz, su apellido artístico). Político en busca de parecer alivianado, con los narcotraficantes asumiendo papeles de presuntos justicieros y gobernantes. Sus características normales son la brevedad y la ineficacia. Farol de la ONU y trágica oscuridad de su país.

De parejas


Solo, puedes levantar el mundo. En pareja, siempre llega un momento en el que tienes que cargar al otro, que pesa entonces más que el mundo.
- Vincent La Soudière.