Tuesday, July 22, 2008

Volver a la carga



Poco a poco, muy despacito si se quiere, los hilos que me venían manteniendo atado se van deshilvanando. Los pendientes financieros y las preocupaciones familiares (para las atribulaciones personales ya habrá tiempo) han estado cediendo. Conforme más débil me sentía en las noches, mas pensaba en la gente que me quiere y que alguna vez me ha dicho “estoy contigo”, lo cual tiene mas valor de lo que los desdichados piensan. Claro que grandes rocas en el camino nunca van a faltar, pero siempre he pensado que son los hechos menores los que nos dan soporte en los días oscuros. La llamada a tiempo de una buena amiga, enterarnos de las buenas nuevas de otro cuate, faltar un lunes a la oficina para compartir la mesa con la familia, escuchar el “!yupi¡” de mi sobrino al ser balanceado en el columpio son los detalles que en dias recientes me han rescatado… por supuesto que aun falta mucho por cumplir y hacer y lo que mas preocupado me tenia es un asunto que va para largo… mi experiencia me ha demostrado que el esperar, aunque cueste mucho trabajo, siempre es mejor que precipitarse.


* * *


Para finalizar, comparto este mordisco de Pio Baroja:

La mayor parte del entusiasmo que produce el régimen democrático en ciertos trepadores depende de la posibilidad de hacer una carrera con rapidez, de la ilusión de representar un papel en el Congreso, de farolear, dar unos paseos en la tribuna, y de estirar los puños ante el público

1 comment:

Pedro Aguirre said...

¡Qué bueno que recuperaste esta estupenda cita de don Pío Baroja! Por cierto, ya está la famosa entrada de Vallejo que tanto me reclamaste.