El proceso de independencia comenzó el 16 de septiembre de 1810 cuando Hidalgo tocó la campana de Dolores. Pero México no logró su independencia en 1810: ni Hidalgo, ni Allende, ni Morelos, ni Guerrero llegaron a ser el George Washington o el Thomas Jefferson de los Estados Unidos Mexicanos. Como políticos fracasaron aunque la insurgencia continuara combatiendo hasta tal punto que el ejército real apenas podía sostener más la lucha cuando Iturbide estaba virtualmente obligado a llegar a un acuerdo con Guerrero porque no podía derrotarlo.